Decidí hacer esta obra de arte por la simple razón de poder expresar el antes y después del planeta, el antes como lo podemos ver en la pintura es naturaleza pura, todos estábamos en paz con la gente y con la naturaleza, podíamos salir donde quisiéramos y también éramos unos verdaderos amigos del planeta y la tratábamos como lo merecía con todo el respeto, porque ella fue la que nos ofreció un hogar; el después también lo podemos evidenciar en la pintura, este significa el maltrato que le estamos haciendo, no solamente al planeta sino a todas las especies que habitan allí, ésta nos puso un castigo, la cual nos prohibió salir de nuestras casas por el COVID-19. ¨CADA DÍA ESTAMOS DAÑANDO Y DETERIORANDO NUESTRO HOGAR¨. Para ayudarlo y enmendar nuestros errores, primero cada uno debe cambiar sus comportamientos, acciones y actos que está tomando con el planeta, para así mejorarlo cada día más.
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Durante esta pandemia en mi hogar he compartido con mi familia, he jugado con mi hermana, con mi papá, con mi mamá y con mi mascota perla, asistimos a la eucaristía por línea, hemos hecho noche de pelis, he visto televisión con mis papás, he estudiado las tablas de multiplicar. mi papá nos da vueltas por mí conjunto en la moto, he paseado a mi perra perla, he visitado a mis abuelos y he jugado con mi hermana a la casa en el patio y en el baño, aprendimos a valorar la vida, a hacer más pacientes, a confiar en la voluntad de Dios y amar más a la familia.
por último quiero invitar a toda la comunidad bethlemitas a confiar en Dios Y a guardar la esperanza de qué pronto superaremos esta pandemia que azota el mundo
Dulce maria Álvarez Leitón
2-A
La familia García Osorio en tiempos de pandemia …
Al comienzo de la pandemia no entendíamos muy bien que sucedía, era una situación extraña estar encerrados, no poder salir a nada y solo pedir domicilios para suplir nuestras necesidades.
Nos refugiamos en Díos, en la oración y todas las noches leíamos pasajes de la biblia. Mamá y papá nos deslumbraban el paladar con grandes platos de cocina que hacían más amenos nuestros días, hasta una torta hicimos entre todos. Las clases, la oficina, las labores domésticas todo se hacía en un espacio muy pequeño como nuestro apartamento; en verdad al comienzo era caótico, pero con el pasar de los días, de los meses nos hemos acostumbrado y ahora todos somos unos expertos en tecnología, en el classroom, en meet y en team, en tolerancia y en las labores domésticas que antes hacíamos poco.
Violetta dice que le parecía la pandemia mala porque no podía ver a sus amigos pero que ahora también le gusta porque ahora tiene a sus papas acá en la casa todo el día y para ella solo. A Samara la hija mayor también le hacen mucha falta sus amigos y es duro para ella por estar atravesando esa dura etapa de la preadolescencia.
En fin han sido y siguen siendo días duros pero con la ayuda de Dios los estamos superando, queremos que llegue una vacuna pronto para volver a abrazarnos y saludar a todos nuestros familiares, amigos y conocidos sin ningún temor.
Familia Gómez Motato
