top of page

Mi Pecado Vs Largo pétalo de Mar

Acabo de leer dos libros muy interesantes, caras opuestas de una misma realidad, leí Largo Pétalo de Mar, de Isabel Allende y Mi Pecado, de Javier Moro. Los dos son excelentes autores.

El contexto histórico en el que se desarrollan ambos libros comprende la guerra civil de España y la triste persecución de los judíos. España alberga estas dos historias y muchas más, pero lo que más me llamó la atención y me hizo pensar mucho, fue la gran diferencia entre dos experiencias de vida, la del joven médico, Víctor Dalmau, quien vivió en carne propia la tragedia del siglo XX en su momento más crucial, sufrió la persecución, el hambre, la guerra y un sin fin de adversidades que cambiaron el rumbo de su vida; un español judío que vivió el drama de la supervivencia en un país que lo vio nacer y del que tuvo que huir para salvar su vida, lejos de España trata de rehacer su vida en Chile, donde la situación también lo golpeó y fue difícil… y la otra cara de la moneda; una joven española que a las puertas de la guerra civil en España, y ante un mundo que se rompía en la tragedia más devastadora que fraguaba una segunda guerra mundial, Conchita Montenegro, vivió desde el mundo superficial y vacío su sueño de ser estrella de cine en Hollywood, abandonó España con ansias de brillar y de vivir un sueño de hadas mientras el mundo se debatía en una guerra inhumana, ella tejió y vivió sus sueños de grandeza al margen de la historia.

Mundos diferentes en una misma realidad, España en los años 30 sufrió una gran depresión económica y el mundo derivaba poco a poco en una segunda guerra mundial; estos dos protagonistas, Víctor y Conchita, constituyen las mismas caras de la realidad que vivimos hoy: La pandemia que a muchos ha afectado profundamente, mientras que a otros los mantiene inmune a la realidad dolorosa que nos golpea a todos.

Es triste ver como la humanidad no aprende de sus errores, aunque todos tenemos un enemigo en común, el COVID 19, seguimos viviendo en nuestros pequeños mundos, al margen del sufrimiento de quienes han sentido más de cerca esta dolorosa situación, desaprovechando la posibilidad de estar en familia, de tener un plato de comida, de tener la posibilidad de continuar nuestra vida sin mayores carencias; aun desde nuestra vulnerabilidad seguimos con salud y no nos falta nada. En cambio, hay mucha gente a nuestro alrededor que vive la soledad, o que están en familia y no se soportan, muchos dependen de su trabajo diario para un plato de comida y viven la angustiosa situación de ver con hambre a sus hijos porque no pueden trabajar, cuántos enfermos y cuánto sufrimiento que no conocemos por vivir el distanciamiento social; el cuidado propio y la desatención por los demás, el confinamiento obligatorio y la indiferencia social. Todos vivimos la misma amenaza, la misma tempestad, pero dolorosamente desde barcas diferentes, unos la viven desde grandes trasatlánticos, cruceros y embarcaciones, otros desde la chalupa, el bote o simplemente a nado…

Solo cuando Conchita conoció el verdadero amor y supo que la vida tenía sentido desde los otros, encontró la paz, seguridad y equilibrio que siempre le hicieron falta. Razón que desde siempre le dio sentido a la vida de Víctor, porque su experiencia, aún en medio del sufrimiento y de las muchas carencias que tuvo, vivió el servicio desde la entrega generosa por los demás, vivió más intensamente su existencia y experimentó la grandeza del verdadero amor.

Leer es lo máximo… Un universo de emociones y aprendizajes bullen en cada página a la espera de un buen lector.

N.D.Z


5 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
Publicar: Blog2_Post
bottom of page